Ventura Pérez Mariño, último alcalde nacido en la ciudad, ha muerto en Vigo a los 75 años. El ex regidor, diagnosticado de Párkinson hace una década, dirigió el Gobierno local durante 6 meses, en 2003, con el apoyo del BNG, hasta que la pérdida de una moción de confianza dio paso a la popular Corina Porro.
Pérez Mariño también había sido diputado por Lugo entre 1993 y el 13 de febrero de 1995, cuando renunció tras votar varias veces en contra del PSOE y pedir la dimisión del entonces presidente, Felipe González.
Abogado y magistrado de la Audiencia Nacional
Ventura Pérez Mariño nació el 29 de diciembre de 1948, era licenciado en Derecho y Administración de Empresas por la Universidad de Deusto. Entró en el despacho del que fuera alcalde de Madrid, Enrique Tierno Galván y accedió a la carrera judicial llegando a magistrado de la Audiencia Nacional.
Allí su nombre se hizo popular tras condenar a Mario Conde por el caso Banesto (20 años de cárcel por blanqueo de capitales). Poco tiempo después solicitó una excedencia y abrió su propio despacho en Vigo, antes de encabezar, como independiente, la lista del PSOE en las Elecciones Municipales de 2003. En aquella convocatoria, los socialistas lograron 8 concejales, 7 el BNG, 2 PROVI y 10 el Partido Popular.
Apenas 6 meses más tarde, el BNG le retiró su apoyo, lo que hizo que perdiese la moción de confianza que había planteado y, con ella, también la Alcaldía que pasaría a manos del PP.
Vuelta a la carrera judicial y homenaje
En 2005, dejó el Concello y se reintegró a su puesto como juez, en Cataluña, volviendo a Vigo un año y medio más tarde para hacerse cargo del Juzgado número 7, hasta su jubilación en 2012.
Un año más tarde, el ex alcalde recibió un multitudinario homenaje de toda la sociedad viguesa, de la cultura a la economía, pasando por asociaciones sociales y miembros de la judicatura, una ocasión que sirvió para juntar a su alrededor al entonces presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, el actual presidente del Tribunal Constitucional, Conde-Pumpido, o el alcalde, Abel Caballero,
