Un profesional del engaño: su nombre Jeison Jair Cuello García, no obstante podría llamarse tranquilamente Jason Ali Hakim Abdullaziz, y vivir como un rey fingiendo ser quién no era. Y es que Jeison mantuvo la apariencia de un destacado embajador del Líbano, exceptuando un pequeño detalle que lo delató…su acento, según informa el diario Excelsior.
En medio año, Jeison de nacionalidad colombiana, logró impartir conferencias sobre el conflicto entre Palestina e Israel en universidades, alcaldías e instituciones privadas. Su prestigio vino acompañado con estancias en los hoteles de mejor renombre, hasta contaba con protección oficial debido a su cargo. Su modo de actuar podría alargar el engaño, si no fuera por las sospechas por su fluidez con el castellano y su acento alejado del árabe.
Las investigaciones confirmaron la duda: el diplomático no era diplomático ni nada que se le pareciese. En Colombia, la embajada del Líbano confirmó que no existía representante alguno con ese nombre, ni con esas referencias…por lo que el ’embajador’ Jeison fue arrestado y conducido…bueno, no precisamente a la suite de uno de esos hoteles que frecuentaba como miembro del cuerpo consular.
