La reconstrucción del paseo que se vino abajo en O Marisquiño de 2018, no estará acabado este año, como había anunciado el Puerto. Está en su recta final, eso sí.
Finalizados los trabajos en el lado mar, y a falta del pavimento de madera y equipamientos, esta semana arrancaba la pavimentación en el lado tierra. Se trata de la zona enlosada situada entre el edificio de la Xunta y la escultura de Julio Verne.
Los trabajos, presupuestados en 4 millones, se iniciaron a principios de este año y en octubre empezó el montaje de los elementos prefabricados que conforman la estructura del paseo de madera. Ahora empieza la pavimentación, después de finalizar el primer tramo del paseo -desde la escultura de Julio Verne hasta A Laxe- por donde pasa el ‘carril bici’.
En esta última parte, se reforzará el pavimento y se cambiarán las losetas existentes por otras de menor tamaño para evitar que se rompan. No obstante, aseguran desde el Puerto, “se mantendrá la tipología existente y se rehará con la misma tecnología estructural, respetando el proyecto original de Vázquez Consuegra”.
El mantenimiento “correspondía al Concello”
Desde la Autoridad Portuaria insisten en que el mantenimiento del paseo correspondía al Concello de Vigo,según el convenio ‘Abrir Vigo al Mar’, del año 1992, firmado por el Puerto, Zona Franca y el propio Concello. Este convenio se extinguió en octubre de 2019, momento en el que el Puerto recuperó el dominio y competencias sobre la zona.
Protección del entorno
Desde la Autoridad Portuaria recalcan que en la ejecución de los trabajos, está poniéndose especial énfasis en las medidas medioambientales de protección del entorno. En este sentido, apuntan que “el desarrollo de las obras se está llevando a cabo desde tierra y sin afectar al medio marino”.
Esta actuación, subrayan, “forma parte de la estrategia de Crecimiento Azul o Blue Growth del Puerto de Vigo, que busca hacer compatible la actividad económica e industrial de la ciudad con espacios para el disfrute de la ciudadanía“.
No estará acabado este año
La ‘culpa’ de que la obra no esté lista este 2021 se debe, explican fuentes del Puerto, al retraso en la entrega de determinados materiales, el inicio de las Navidades y “las interferencias” por las operaciones a ambos lados- mar y tierra- que obligan a esperar hasta el primer trimestre de 2022.
