El Gobierno de Portugal ha confirmado que el número de muertos en el incendio que se ha desatado este sábado en el centro del país ha subido a 57 personas y que ya son 59 los heridos, de distinta gravedad, en el suceso que las autoridades lusas han calificado como “la mayor tragedia de víctimas humanas de los últimos tiempos”.
Las llamas siguen activas aún en cuatro frentes, uno de ellos completamente incontrolado, después de que las llamas se originaran, por causas que aún se investigan, en la localidad de Pedrógão Grande, en el distrito de Leiria.
La mayor tragedia se vivió en la carretera que va de Figueiró dos Vinhos a Castanheira de Pera, donde 18 personas, varias de ellas pertenecientes a la misma familia, murieron dentro de sus coches.
