El presidente de la República de Portugal ha encargado al líder socialdemócrata-el mismo partido en el que él milita y con el que fue primer ministro– Pedro Passos Coelho, que forme nuevo gobierno en el país, pese a que Passos no logró la mayoría en la elecciones del pasado día 4 y a que había una mayoría de izquierdas en el Parlamento.
Aníbal Cavaco Silva considera que debe gobernar el vencedor de las elecciones y ha argumentado que durante más de 40 años de democracia, en Portugal siempre ha gobernado el partido que más votos obtuvo en los comicios.
Tras reunirse con los líderes de los partidos, los de la izquierda –socialistas, comunistas y Bloco de Esquerda- transmitieron al presidente la existencia de un acuerdo para la formación de un gobierno alternativo. Sin embargo, Cavaco Silva ha optado por elegir a los dos partidos más votados. “El gobierno formado por la coalición conservadora quizá no asegura totalmente la estabilidad política del país, pero serían mucho más graves las consecuencias económicas y sociales de una alternativa claramente inconsistente sugerida por otras fuerzas políticas”, afirmó el presidente.
