El nuevo portavoz del PP en el Congreso, Rafael Hernando, y su adjunto Rafael Merino, han sido condenados a pagar 20.000 € a Unión Progreso y Democracia (UPyD), más las costas del proceso y el anuncio de rectificación en prensa, por daños a su honor al haber acusado falsamente de financiación ilegal a dicho partido.
Los hechos se remontan a junio de 2013, cuando los entonces portavoces adjuntos del Grupo Popular acusaron de financiación ilegal a UPyD en varias entrevistas con medios de comunicación. Hernando llegó a decir que los ‘magenta’ tenían «el pañal muy sucio» y no podían dar «lecciones de legitimidad democrática».
Los dirigentes del PP se basaban en el informe del Tribunal de Cuentas correspondiente al ejercicio de 2008 donde se apreciaban donaciones a UPyD no identificadas por importe de casi 28.500 €, pero la institución fiscalizadora indicaba que el problema no era atribuible al partido, sino al banco donde estaba su cuenta, que había aceptado esos donativos sin identificar a los donantes y que en todo caso ese dinero quedaba inmovilizado.
UPyD optó por llevar a los tribunales a los dos dirigentes del PP, pidiéndoles una indemnización de medio millón de euros. La sentencia no llega a esa cantidad pero el juez admite la demanda en lo «sustancial» y rechaza el argumento de Hernando y Merino acerca de que estaban haciendo uso de su libertad de expresión.
