Medio centenar de Afectados por la compra de Preferentes se dejaron ver en la llegada de la Vuelta a España al Alto da Grova, donde aprovecharon, además de para pedir firmas entre los miles de personas que esperaban la llegada de los ciclistas, volver a exigir la devolución de sus ahorros. Ataviados con sus camisetas y coreando lemas a favor de la apertura del arbitraje, los afectados desplegaron sus pancartas a apenas 500 metros de la línea de meta, agitando banderas e intentando que se les viera cuando pasaban los ciclistas.
Al finalizar la prueba, se han encarado con el presidente de la Diputación, Rafael Louzán, al que han acusado de gastarse dinero en la prueba y de no hacer nada para que ellos recuperasen su dinero. Vigilados por varios agentes de la Policía Nacional, el enfrentamiento con el presidente llegó a su máxima tensión cuando este, acompañado por el alcalde de Baiona, descubrió un monolito en recuerdo de la llegada de la segunda etapa de la ronda ciclista al Alto da Grova. En ese momento se cruzaron acusaciones muy graves, a las que Rafael Louzán contestó diciendo al portavoz de la plataforma do Baixo Miño que se aprovechaba de que él podía decir de todo mientras que las autoridades tenían que guardar las formas.
Fue en ese momento cuando arreciaron los gritos de los afectados que fueron detrás de Louzán exigiéndole que hiciese “algo” por ellos y acusándole de no importarle “gastar el dinero público” en actos como el que acababa de protagonizar mientras “a nosotros nos quitan nuestros ahorros”. El presidente contestó varias veces a los afectados, hasta que, finalmente, acompañado por varios responsables de la Diputación, se retiró del lugar visiblemente molesto.
