Que su admirado dictador sea una pieza artística estos días en ARCO les parece una auténtica locura. Hablamos de la Fundación Franco que denunciará a Eugenio Merino, autor de la obra “Always Franco“, por haber esculpido al caudillo y meterlo con su traje militar en una máquina frigorífica de Coca Cola.
La cosa va tan en serio que hoy mismo un representante de la Fundación Franco se ha personado en la exposición con cámara de fotos en mano y también con un notario.
No es por malmeter, pero desde aquí advertimos a la Fundación Franco que la denuncia a lo mejor la amplían porque este año hay mucha presencia del dictador por ARCO. Otro artista presente, por ejemplo, colocó al más puro estilo de las estrellas del paseo de la fama de Hollywood la cara de Franco, junto a los rostros de Hitler y Stalin.
De momento, no descartan demandar al artista del caudillo congelado por la vía de lo penal, al considerar que la obra atenta contra el sentido de la estética y el arte.
