Sol, calor y fin de semana. Es la combinación perfecta para llenar las playas, sobre todo después de largo invierno que hemos tenido. Los vigueses han aprovechado las temperaturas veraniegas para tomar los primeros rayos de sol y, los más valientes, para darse el primer baño del año, ya que el agua no superaba los 14 grados.
Sin embargo, la afluencia masiva a las playas nos deja otra imagen menos amable: basura en cada esquina. Por muy civilizados que seamos, las papeleras rebosan. Quizás es que son insuficientes o quizás es que después de Semana Santa ya debería estar preparado un dispositivo de limpieza, socorristas y voluntarios de Cruz Roja para que estén presentes en las playas los días de buen tiempo como hoy. Al menos los fines de semana.
Para nuestra desgracia, mañana el anticiclón se irá desplazando hacia el norte y comenzaremos a notar el aire un poco más frío y podrán empezar a verse algunas nubes. Las temperaturas bajaran unos cuatro grados en Vigo.
