Parece que al alcalde de Vigo, Abel Caballero, no le gusta escuchar las críticas y por eso hoy impidió darle la palabra a varios colectivos sociales que lo habían solicitado formalmente. Ocurrió durante el pleno ordinario celebrado esta mañana, en donde, si bien no permitió darles voz , no le quedó otra que aguantar el chaparrón que le llovió por parte de la oposición.
BNG y PP prácticamente al unísono criticaron esta actitud de Caballero, quien argumentó ese rechazo a no dejar hablar a esos colectivos sociales a un informe no escrito del secretario del pleno.
Esta explicación cabreó bastante al portavoz del BNG, Santiago Domínguez, que espetó al regidor que no buscara excusas y que esa «decisión política» había sido suya exclusivamente.
El nacionalista lamentó que el Ejecutivo minoritario que dirge Caballero nunca quiera reunirse con los colectivos no afines a su gestión y aseguró que cuando un Gobierno no acepta ni una sola crítica «se equivoca siempre».
En la misma línea se mostró el portavoz del PP, José Manuel Figueroa, que recordó que fueron populares y nacionalistas los que propusieron esas intervenciones en el pleno.
Sin embargo,el regidor socialista insistió que él siempre sigue las indicaciones del secretario municipal y que, en este caso, sólo se limitó a hacer lo mismo.
