Es una multa que arrastra desde febrero de 2005 y que estaba siendo recurrida. Pero ahora el Tribunal Supremo ha dictado sentencia: Caixanova tendrá que pagar los 600.000 euros que le requiere el Ministerio de Economía por no cumplir las medidas de prevención de blanqueo de dinero por no comunicar al Servicio Ejecutivo de Prevención de Blanqueo de Capitales e Infracciones Monetarias que se habían realizado algunas operaciones delictivas.
Esta sentencia considera que la entidad bancaria cometió cuatro infracciones graves: no le comunicó al Ministerio las irregularidades, por lo que tendrá que pagar 250.00 euros; no llevó a cabo medidas de control interno (150.000 euros); no formó a la plantilla en materia de prevención (125.000 euros) ni identificó ni guardó los documentos de los posibles clientes que cometieron el delito (75.000 euros).
