Alrededor de 20 personas se concentraron este viernes por la mañana en la oficina que Ibercaja tiene en la calle Urzáiz para protestar ante la intención de la entidad de embargarle el piso a uno de sus clientes y, además, hacerse con la propiedad de los padres del mismo, que figuraban como avalistas en el crédito hipotecario que había pedido.
Según explicó Leandro, afectado por esta situación, la entidad, “con la que había llegado un acuerdo para hacer frente a los pagos”, le reclama 143.000€ y no acepta, “pese a que cumplo los requisitos, ni la dación en pago ni una quita en la cantidad que aseguran que le adeudo”.
Los concentrados, entre ellos miembros de ‘Stop desahucios’ que ayer estaban entre las personas que se oponían al derribo de una casa en Camos (Nigrán), gritaron consignas exigiendo la aprobación de la dación en pago como sistema para zanjar las deudas con los bancos y, además de desplegar varias pancartas, pasearon un ataúd por delante de la puerta de la sucursal.
El afectado, ante la mirada de varios agentes de la Policía Nacional, que custodiaban la puerta de entrada a la entidad, se ‘crucificó’ simbólicamente mientras las personas congregadas hacían sonar silbatos, sirenas y gritaban en contra de una política que, como destacó uno de ellos, “beneficia solo a los bancos y no a las personas”.
