La batalla por las sedes del Mundial 2030 calienta motores y el pulso se libra con intensidad. Prueba de ello son las declaraciones del alcalde de Vigo, Abel Caballero, que ha salido al contraataque tras los comentarios del presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Rafael Louzán, quien puso en duda la capacidad de Balaídos para albergar partidos del campeonato.
Esto declaró Rafael Louzán…
Durante un desayuno informativo en Madrid, el presidente de la RFEF expresó su deseo, “como gallego de bien”, de que Galicia tenga “quizá no una, posiblemente dos sedes”, en referencia a A Coruña y Vigo, pero lanzando un aviso al alcalde vigués: “a veces hay que hablar menos y hacer más”.
En concreto, el presidente de la RFEF apuntó que el Estadio Municipal de Balaídos tendrá 30.000 cuando se acabe su actual remodelación -que recordó él ayudó a iniciar como presidente de la Diputación de Pontevedra, firmando un convenio con Abel Caballero-, aunque, indicó, las exigencias de la FIFA para albergar partidos del Mundial fijan el mínimo en 43.000 localidades. Según él, el Concello pretende adaptar de nuevo el diseño del estadio para cumplir con ese requisito, lo que supondría “tirar parte de lo que ya está hecho”.
“Dije el otro día en Vigo [refiriéndose al alcalde] que, a veces, hay que hablar menos y hacer más. Hoy estamos camino de 2026 y esa renovación no se ha terminado, se han invertido casi 50 millones y faltan dos años para que se termine. Vamos a ver. El tiempo pone a cada uno en su sitio”, señaló.
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…y esto le ha respondido Abel Caballero
“Louzán sigue intentando que Vigo no sea sede del Mundial y lo hace apoyándose en mentiras”, disparó Caballero este jueves, elevando la tensión en una carrera que se prevé decisiva para el fútbol gallego. El regidor negó que el estadio vigués no cumpla los requisitos exigidos por la FIFA y aseguró que “Balaídos alcanzará los 43.000 espectadores antes de los plazos marcados”.
Mentiras
Según el alcalde, “la primera mentira” del presidente federativo es afirmar que el estadio no llega al aforo mínimo. “Eso es falso“ afirmó, y aseguró que hay otros campos que Louzán da por válidos —como los de Zaragoza, Valencia o A Coruña— que tampoco alcanzan ahora esa cifra. “Vigo está cumpliendo con las obras y llegaremos a los 43.000”, insistió Caballero.
El regidor también reprochó a Louzán no haber propuesto a Vigo como sede ante la FIFA, “pese a que era la siguiente ciudad en la lista tras la renuncia de Málaga. Eso demuestra su falta de apoyo a Vigo”, sentenció.
“Quien pagó las obras fue Carmela Silva”
Caballero no dejó pasar la pulla y admitió -y agradeció- que fue Louzán quien, siendo presidente de la Diputación de Pontevedra, firmó en 2015 el convenio para reformar Balaídos. “Pero, todo el mundo sabía que perdería la Diputación y quien pagó la obra fue Carmela Silva, cuando lo sustituyó al frente de la Diputación. Esa es la realidad”, zanjó el alcalde.
Por último, Abel Caballero reservó un último mensaje político con sabor a revancha, cuando refiriéndose a la frase de Louzán de que ‘el tiempo pone a cada uno en su sitio’, concluyó “hay que ver dónde está cada uno ahora: yo estoy aquí, y él está en casa”.