El ministro de Asuntos Exteriores ha anunciado este jueves que España intervendrá en el procedimiento del Tribunal Internacional de Justicia contra Israel. El mismo fue iniciado por Sudáfrica para denunciar la comisión de delitos de genocidio y contra la humanidad en los bombardeos continuados e indiscriminados contra la población civil, en Gaza y en los campos de refugiados, por parte de las fuerza armadas israelíes. El último de ellos este mismo jueves, asesinando a 32 personas al atacar una escuela de la ONU.
José Manuel Albares ha asgurado que “se trata de un paso que llevamos analizando muchas semanas” y ha declarado que el Gobierno toma esta decisión con un doble objetivo, “que la paz regrese a Oriente Medio y por nuestro compromiso con el derecho internacional para apoyar a las Naciones Unidas“.
Hay que recordar que a final de enero, el Tribunal Internacional de Justicia respondió a la petición de Sudáfrica de iniciar un proceso contra el Estado de Israel, por presuntas violaciones en la Franja de Gaza de las obligaciones establecidas en el Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio.
Orden de arresto contra Netanyahu
Además de ello, el mes pasado, Karim Khan, fiscal jefe de la Corte Penal Internacional, solicitó órdenes de detención contra tres terroristas asesinos de Hamás, entre ellos Yahya Sinwar, y el primer ministro de extrema derecha de Israel, Benjamín Netanyahu, además de su ministro de Defensa, Yoav Gallant.
Los acusa de acusados de crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad por los atentados del 7 de octubre contra Israel y la posterior guerra en Gaza.
60 países
Albares ha declarado que “presentamos una declaración de intervención en el procedimiento abierto por Suráfrica en el Tribunal Penal Internacional. Pedimos una vez más el cese de los bombardeos, el alto al fuego en Gaza y la liberación incondicional de los rehenes [israelíes]”.
Alrededor de 60 países apoyan ya esta causa, incluyendo la mayoría de los estados árabes o de América Latina, pero hasta ahora en la Unión Europea sólo se habian posicionado, Irlanda, Bélgica y España.
