La Guardia Civil tiene fundados motivos para creer, según un informe que forma parte del sumario del ‘Caso Púnica’, que el Partido Popular de Madrid habría subvencionado parte de los gastos relativos a la campaña de las generales de 2008 –en las cuales Mariano Rajoy era el cabeza de cartel de los populares- con fondos públicos.
En concreto, el informe indica que el dinero procedente de subvenciones otorgadas por la Comunidad de Madrid, entonces presidida por Esperanza Aguirre, a la Fundación Fundescam, habría servido para pagar banderolas, folletos electorales, publicidad exterior y hasta el ‘telepronter’– el aparato eléctrico en el cual el quien da un mitin puede leer lo que debe de decir- que se usaba en los actos de campaña del PP.
Para desviar este dinero, la Comunidad de Madrid habría usado una facturación falseada para cursos que nunca se impartieron de diseño gráfico y técnica audiovisual y pagar con esas cantidades los referidos gastos electorales.
