Dos detenidos en Vigo por presuntos delitos de violencia de género en las últimas horas. Sobre las 02.00 horas agentes de la Policía Local de Vigo detenía a un hombre de 36 años después de que una mujer llamara a la comisaría diciendo que su pareja la estaba agrediendo y se cortara la llamada.
Una patrulla se presentó en el domicilio, en la calle Zamora, donde ya en el portal se escuchaban gritos y golpes. Al llegar a la vivienda se encontraron en el descansillo del tercer piso a dos mujeres discutiendo, madre e hija, y a un hombre en estado alterado.
Una de las mujeres, de 24 años, explicó a los agentes que había ido hasta allí porque su pareja, con la que llevaba dos años, quería hablar con ella. Aseguró que sufre malos tratos físicos habitualmente, que los había denunciado en varias ocasiones aunque al final las había retirado, que tenía una orden de alejamiento y que había tenido que ser asistida por los servicios médicos en varias ocasiones.
La mujer explicó que la última agresión había sucedido hace unos días, cuando su pareja le había propinado un fuerte golpe en el ojo izquierdo. Los agentes vieron que aún tenía un hematoma e hinchazón en el ojo y en la barbilla y una rotura parcial del incisivo central derecho, quejándose también de un fuerte golpe en el pecho.
El interior de la vivienda estaba revuelto y cubertería en el suelo. La mujer fue trasladada en ambulancia al Hospita Álvaro Cunqueiro.
Los vecinos defienden a una mujer agredida en Travesía de Vigo
Apenas una hora antes, otro hombre de 35 años era detenido en la Travesía de Vigo por otro presunto delito de violencia de género.
Fueron los vecinos los que dieron aviso a la Policía Local al estar produciéndose una pelea en el descansillo de la primera planta del edificio. Una mujer de 27 años estaba en su domicilio cuando empezó una fuerte discusión con su pareja y le dijo que no quería saber nada más de él.
El hombre le dijo que se llevaba su ropa, la televisión y las llaves del piso, momento en el que se produjo un forcejeo en el que él le propinó a la mujer varias bofetadas en la cara. La discusión continuó en el descansillo de la vivienda.
Varios vecinos escucharon los gritos y salieron a ayudar a la mujer, lo que acabó en un nuevo forcejeo entre ellos y el agresor. Consiguieron quitarle al hombre las llaves, momento en el que él abandonó el edificio.
Fue localizado en un piso de su propiedad poco después, donde fue detenido por un presunto delito de violencia de género.
