Una cosa es lo que el Gobierno en funciones-que se niega a dar cuentas de su gestión en el Congreso de los Diputados- y otra lo que hace. Si días atrás el presidente en funciones reclamó en que el acuerdo de la Unión Europea con Turquía excluyese las ‘devoluciones de #Refugiados en caliente”, este mismo domingo las Fuerzas de Seguridad del Estado, siguiendo órdenes del Ejecutivo, expulsaron ‘en caliente’ a Marruecos a varias personas que habían estado horas subidas a la valla de Melilla.
Varios medios de comunicación informan de que unos 300 migrantes intentaron saltar la valla aunque solo algunos de ellos pudieron subir a la misma y estar varias horas en la parte alta de la misma. Cuando el cansancio les pudo y lograron llegar a suelo español, fueron devueltos, al momento, a Marruecos por efectivos de la Guardia Civil.
Hay que recordar que esta práctica es algo habitual desde que se aprobó la Ley de Seguridad Ciudadana, la popularmente conocida como ‘Ley Mordaza’, que introdujo lo que se conoce como ‘rechazo en la frontera’, un término que da cobertura legal a las devoluciones en caliente que, según varias directivas de la propia Unión Europea y la Declaración de Derechos Humanos de Naciones Unidas, son actos ilegales.
En base a esta regulación, Izquierda Unida ha anunciado que interpondrá, en el Tribunal Supremo, una ‘querella criminal’ contra Mariano Rajoy por haber suscrito el acuerdo entre la UE y Turquía para la devolución a este país a los #Refugiados que logren llegar a Europa. Izquierda Unida asegura que Rajoy ha cometido varios delitos, entre ellos la denegación de socorro y trato inhumano a las personas que llegan a Europa y a las que se niega la posibilidad de asilo.
