Nueve meses después de sufrir un terrible accidente, el piloto de Fórmula 1 Jules Bianchi falleció este viernes por la noche como consecuencia de las lesiones cerebrales que padecía, según informó su familia en un comunicado.
Bianchi, de 25 años, estaba en coma desde el pasado mes de noviembre, cuando su monoplaza se empotró en el circuito de Suzuka contra una grúa que en aquel momento estaba izando el Sauber de Adrian Sutil.
El piloto fue trasladado inconsciente al hospital, y desde entonces había permanecido en condición crítica. Después de un primer periodo de ingreso en Japón, los doctores decidieron acercarle a casa y lo trasladaron a un hospital de Niza.
“Jules ha luchado hasta el final, como siempre hizo, pero hoy su batalla ha llegado al fin”, afirmaba la familia; “sentimos un dolor inmenso e indescriptible”.
