El ciberacoso acabó con la vida de Matthew Burdette, un chaval de solo 14 años, que se suicidó después de que sus ‘compañeros’ de clase publicasen en Internet un vídeo en el que aparecía masturbándose.
Matthew estaba en los baños del colegio y sus compañeros le grabaron con el móvil sin que se diese cuenta, más tarde ese vídeo se convirtió en viral en las redes sociales.
Ahora, según informa el diario ‘Independent’, los padres del joven han denunciado al distrito escolar por no haber tomado medidas anteriormente del acoso que sufría continuamente su hijo. Aunque ya es tarde.
