El Gobierno central y las comunidades autónomas redujeron la inversión en Infancia un 14,6% entre 2010 y 2013. Ello significa que se recortaron 772 euros por cada niño, volviendo así a cifras previas al año 2007 y rompiendo la tendencia presupuestaria al alza que se mantenía desde entonces.
Según el informe ‘La Infancia en España 2014. El valor social de los niños: hacia un Pacto de Estado por la infancia’ expone que la pobreza infantil aumentaba a la vez que el presupuesto disminuía. España invierte en infancia menos que la media europea, un 1,4% del PIB frente al 2,2% de la UE28. El Estado ocupa la segunda posición, por detrás de Grecia, con un 6,9% frente al 32% de otras naciones.
En 2013 el presupuesto se situó en los 42.483 millones de euros, el 65% se destinó a Educación, a continuación Salud (18%), Prestaciones sociales (10%) y Bienestar Social (7%). En España 2,3 millones de niños sobreviven en el umbral de la pobreza, aumentando las familias con niños que disponen de todos sus familiares desempleados (209%).
