Investigadores de distintas disciplinas coordinado por la Fundación Hospital Nacional de Parapléjicos (Toledo) han descubierto el carácter terapéutico del ácido oleico, vinculado a las dolencias del nervio periférico y en el tratamiento de la ansiedad. El estudio publicado en Eur J Pain confirma que los ácidos grasos (véase los Omega 9) podrían modificarse para aliviar los síntomas en el paciente.
Al inhibir el dolor, la medicina muestra un efecto analgésico. El profesional del departamento de Farmacología y Nutrición de la Universidad Rey Juan Carlos, Carlos Goicoechea, declara que el efecto calmante ayudaría “en uno de los dolores más difíciles de tratar que existe, el dolor neuropático, siendo capaz de disminuir tanto la hiperalgesia como la alodinia”.
El fármaco y su efecto anti-inflamatorio no produce reacciones adversas destacables. La licencia del compuesto estará a cargo de la compañía biofarmacéutica Lipopharma de Palma de Mallorca, para su explotación comercial
