Se trata de pequeñas bolsas plásticas con una capacidad de 5cl, que contienen ron, whisky, brandy, ginebra o vodka. Su venta es legal, siendo innecesario ningún control para su comercialización en los establecimientos de alimentación, además se camuflan de forma sencilla ante los registros en la entrada de los locales.
La Ley no permite la venta de bebidas alcohólicas a menos de 18 años, sin embargo, esta nueva tendencia se está expandiendo entre los más jóvenes, que pueden adquirir los sobres con facilidad e introducirlos en recintos donde no está permitido beber. La empresa que fabrica los envases es española y se mantiene ajena a la polémica.
Las bolsas monodosis afectan a las sesiones de las discotecas de tarde, denominadas light, cuyo público ronda de los 14 a los 17 años. Aunque se incrementan los controles de seguridad y los porteros revisan tanto vestuario como bolsos, los menores se las ingenian para introducir la bebida en los recintos. Actualmente, la edad de iniciación al consumo de alcohol no sobrepasa los 14 años.
