El siniestro vivido en el territorio marroquí se ha cobrado la vida de al menos 13 inmigrantes que han fallecido al intentar entrar a nado en Ceuta. El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz comparecerá la próxima semana en el Congreso de los Diputados para aclarar lo sucedido.
Según han informado fuentes de la Delegación del Gobierno, durante el jueves más de 200 personas intentaron acceder a Ceuta cruzando la valla levantada en la zona del Tarajal. Tras el primer intento frustrado, un grupo prosiguió intentándolo a nado para burlar los controles fronterizos de la Gendarmería marroquí.
Lo acontecido ha motivado que durante una hora se cerrase la frontera del Tarajal para impedir que los inmigrantes se mezclaran con los marroquíes que cruzan la frontera para trabajar o realizar sus comprar. Desde hace dos años, asaltar la frontera es la táctica empleada por los inmigrantes subsaharianos ante la dificultad de acceder a pie por los 8 kilómetros terrestres a consecuencia de la vigilancia y la doble valla con seis metros de altura.
La ONG Caminando Fronteras ha denunciado, según los testimonios recogidos de los propios inmigrantes, que la Guardia Civil ha disparado pelotas de gomas y gases lacrimógenos, mostrándose más agresivas que los agentes marroquíes al reprimir el intento de llegada de los inmigrantes a España.
