La Federación de Asociaciones de Consumidores (Facua) ha asegurado este lunes que el Ministerio de Industria, ha subido para el primer trimestre del año un 17,9% el término de potencia del recibo de la luz – el popular término fijo- y ha bajado un 6,9% el de energía eléctrica – conocido como término variable– en las tarifas que, desde enero, se llama Precios Voluntarios para el Pequeño Consumidor, en sustitución de la Tarifa de Último Recurso (TUR).
Con la resolución publicada el pasado sábado, 1 de febrero, en el Boletín Oficial del Estado (BOE), el precio del kilovatio (kW) de potencia contratada ha pasado de los 2,97 € mensuales en los que se había fijado desde agosto de 2013 a 3,50 € mensuales, más el 27,19% de impuestos indirectos. En cuanto a la energía consumida, pasa de los 0,133295 euros por kilovatio hora (kWh) establecidos este enero a 0,124107, una tarifa casi idéntica a la que el Gobierno estableció en agosto del año pasado para después subirla un 6,6% en cinco meses.
Según los análisis de Facua, “un usuario medio” con 4,4 kW de potencia contratada y 366 kWh de consumo mensual, pasará a pagar con las nuevas tarifas 77,38 € mensuales, impuestos indirectos incluidos, lo mismo que abonaba con las tarifas vigentes entre octubre y diciembre del año pasado.
Por su parte, un usuario con 4,4 kW y un consumo de 250 kWh mensuales abonará 59,07 €, el mismo importe que con las tarifas fijadas este enero y 0,95 € al mes más, un 1,6%, que los 58,12 € que suponían con las publicadas en el BOE en octubre de 2013.
La organización ha denunciado que la factura se ha encarecido un 35,1% en los últimos cinco años para el usuario medio. Con las tarifas fijadas en el primer semestre de 2009, el recibo representaba 57,29 € mensuales, impuestos indirectos incluidos, y hoy asciende a 77,38 €.
