La Policía Nacional ha desarticulado en Málaga un grupo criminal que se dedicaba a la explotación sexual de mujeres, operación que ha sido posible gracias a la denuncia de una de ellas quien denunció que era obligada a ejercer la prostitución mediante amenazas y agresiones.
Según ha informado la Policía, los miembros de este entramado criminal, al margen de esta actividad, estaban implicados el tráfico internacional de estupefacientes y a la compra a otras organizaciones de papel moneda falsificado para ponerlo en circulación.
La operación se inició el pasado mes de febrero, cuando una mujer aseguró a los agentes que estaba siendo obligada a ejercer la prostitución bajo todo tipo de amenazas y agresiones. La joven explicó que un hombre le había ofrecido alojamiento y manutención en una vivienda de Málaga y que, a los pocos días de estar en el domicilio, le dijo que ya no podía hacerse cargo de su manutención y la obligó a ejercer la prostitución en las proximidades de una estación de autobuses, teniendo que entregarle el 50%, además de pagar el alquiler de la casa y los gastos personales del proxeneta.
La víctima indicó durante su declaración, que se había quedado embarazada y que, estando en esta situación, conocida por sus explotadores, era obligada a ejercer la prostitución durante doce horas al día, etapa durante la cual permaneció aislada y sufría constantes amenazas y agresiones.
Los agentes comprobaron que este grupo controlaba el negocio de la prostitución en el Polígono Industrial de Guadalhorce, en la capital malagueña. La red captaba mediante engaños a mujeres en Rumanía aprovechándose de su mala situación económica, y las traían a España donde las obligaban a prostituirse. Además, los investigadores averiguaron que estaban coaccionando a otros proxenetas que operaban en el mismo lugar con el objetivo de expulsarlos.
Con toda esta información, se estableció un dispositivo para localizar y detener a los miembros de esta organización que se ha cerrado con la detención de once personas, entre ellas su máximo responsable.
Durante el operativo se han realizado cuatro registros domiciliarios en Málaga, en los que se han intervenido diversas cantidades de cocaína y marihuana, billetes de cincuenta euros falsificados, dinero en efectivo, dos teléfonos móviles y documentación. También se identificó a seis mujeres que estaban siendo víctimas de explotación sexual, de las que tres se han acogido voluntariamente a las medidas de protección previstas en la legislación vigente.
