Los 1600 trabajadores de la compañía pública de transporte de Marsella, RTM, no acudirán al trabajo durante 24 horas en junio como queja por la calidad, el color, que ha cambiado de amarillo al verde, y lo estrecho de sus pantalones.
Según ha declarado el líder del sindicato CGT, “además, el nuevo color es el mismo que el de los gendarmes” y los conductores “no quieren ponerse un uniforme que ha sido elegido unilateralmente por la dirección”.
Por su parte, el diseñador del uniforme, Jonathan Charles, ha defendido su creación: “la gente dice que el nuevo les hace parecer payasos, pero eso ya les pasaba con los uniformes antiguos”.
