Según ha podido comprobar vigoalminuto durante estos días, los empleados de la XER, encargados de controlar el aparcamiento en las zonas azules de la ciudad, sí que controlan, con o sin chaparrón, si el conductor que ha estacionado en una de estas plazas coloca el tique, si pasado el tiempo del mismo mueve el coche, o si no lo hace. En este último caso, por supuesto que pone la sanción en el parabrisas y metida en una funda de plástico.
Esta redacción ha podido constatarlo en varias calles del entorno de la Gran Vía y As Travesas e, incluso, para que no quedase duda de que las sanciones se aplican esos días, se ha encontrado con una de ellas en el parabrisas del coche de uno de los trabajadores de este diario. La sanción, que pudo ser anulada pagando 2,5 €, había sido puesta por exceder el tiempo de aparcamiento indicado en el resguardo que sacamos cuando aparcamos.
Lo que no controla, en este caso la Policía Local, es el estacionamiento indiscriminado, en doble fila, ni en la Gran Vía ni en las rúas Gerona, Alfonso X y Otero Pedraio, en las inmediaciones de los colegios que hay por la zona, a la hora en la que entran los niños.
En la mayoría de los casos, los familiares dejan el coche bastante más de cinco o diez minutos para llevar a los niños a clase y, en muchos casos, sus conductores no tienen problema alguno en que este se quede sobre la acera, en plazas de carga y descarga, en pasos de cebra o en la entrada de garajes, mientras aprovechan para desayunar o hacer la compra, lo cual, alrededor de las 9 de la mañana causa atascos considerables, en especial en Gran Vía, o impide retirar el coche a quienes sí han estacionado correctamente o salir de su casa a quienes lo hacen desde su garaje.
