Al menos 131 personas han muerto desde el pasado miércoles tras sufrir una intoxicación alimentaria en la localidad filipina de Makilala, al sur del país, según la última cifra de víctimas, facilitada por el Consejo Nacional para la Reducción de Riesgos y la Gestión de Desastres (CNRRGD) de Filipinas.
Las víctimas habían comido un desayuno que les sirvieron después de participar en un maratón, tras lo cual empezaron a tener dolor de estómago y a vomitar. Según el CNRRGD, 128 personas están ingresadas en distintos hospitales de la zona.
