El tribunal que juzgó a Javier Cruz, autor confeso de la muerte de la joven Laura Alonso en Toén, le ha condenado a 18 cárcel y el pago de una indemnización de 200.000 €, como ha notificado a las partes personadas en el proceso. Cruz fue declarado culpable del asesinato de Laura Alonso por un jurado popular.
Los miembros del mismo entendieron que cometió un asesinato, pese a que la defensa alegó que se trataba de un homicidio imprudente por el cual su cliente no debía de ser condenado a no de 16 años. El jurado apreció las pruebas de los peritos y las afirmaciones de los testigos, que estuvieron declarando más de tres días, entre ellos la psicóloga de Laura, quien relató que el asesino, al que conocía desde los 14 años y con el que mantenía una relación, la golpeaba habitualmente y le apretaba el cuello causándole hematomas que le obligaban a cubrírselo en invierno y verano.
