Así lo han anunciado CC.OO. y UGT. En un comunicado conjunto, los dos sindicatos hacen un llamamiento a la sociedad civil y a los sectores más dinámicos de la misma para compartir la convocatoria de manifestaciones “masivas“. Ambas centrales rechazan el “nuevo ataque a los derechos y prestaciones de las personas en paro, empleados públicos y pensionistas, que, junto a la fuerte subida del IVA, provocarán una caída del consumo, menos actividad económica y más destrucción de empleo”.
Esta convocatoria forma parte de una estrategia de “movilización sostenida” contra los recortes “decidida hace unos meses”, que conocerá en otoño una expresión “más firme y contundente“, una expresión que podría dar paso a la segunda huelga general en menos de un año del Gobierno Rajoy en ejercicio.
De nuevo, los sindicatos anuncian que consultarán a los ciudadanos para que se pronuncien sobre los “recortes sociales y laborales” ante lo que consideran un “auténtico fraude político de un Ejecutivo que gobierna con un programa que no presentó a las elecciones”.
Los empresarios, satisfechos
En el lado contrario, las organizaciones empresariales CEOE y Cepyme han calificado de “adecuadas” las nuevas medidas anunciadas por el Gobierno, aunque consideran que habría sido “deseable” que el ajuste hubiese hecho mayor incapie en el gasto y no tanto en los ingresos, puesto que “los impuestos han subido de forma significativa” en los últimos tiempos y este tipo de medidas acabarán lastrando el crecimiento y la creación de empleo.
Al margen de ello, en su opinión, están justificadas para reducir el endeudamiento, clave para salir de la crisis, así como para recuperar la confianza de los inversores. Entre ellas describen como “un paso muy importante”, la reducción de las cotizaciones sociales que, según su apreciación, mejorará la competitividad e incidirá positivamente en el mercado laboral.
