Eso de no llevar encima el móvil pone nervioso a más de uno, sobre todo, entre los universitarios. Según un estudio difundido hoy por la Universidad de Granada, un 8% de los matriculados en la universidad sienten auténtica fobia a salir de casa sin su móvil.
Se trata de nomofobia -abreviatura en inglés de no mobile phone phobia- un miedo totalmente irracional a no tener a mano el móvil y originado, a su vez, al uso patológico del mismo.
Pero la investigación no sólo se queda ahí, es que además, resulta que los jóvenes adictos a los teléfonos móviles se aburren más a la hora de llevar a cabo su ocio, son más extrovertidos y buscan más sensaciones nuevas que los no adictos, si bien presentan una autoestima más baja. Y como cualquier otra fobia, la nomofobia se manifiesta con síntomas como ansiedad, malestar general, enfado o inquietud, sentimiento de culpa o disminución de la autoestima.
La adicción al móvil es cada vez mayor en lo que a envío y recepción de mails, SMS, y MMS y el uso de programas como Whatsapp se refiere.
