“Rajoy recibe la peor herencia para un gobernante y no solo durante la democracia”. Así de claros han sido el coordinador económico del PP, Cristobal Montoro y el secretario de Economía y Empleo del partido, Álvaro Nadal, en declaraciones a la Cadena Cope. Aunque el próximo presidente había repetido que no culparía a su antecesor y que se centraría en la gestión, parece que sus colaboradores no están dispuestos a hacer lo mismo.
Basándose en dicha herencia, ambos han dejado claro que “2012 será un año muy difícil en el que no se creará empleo”, al tiempo que han recalcado que “la prioridad es reajustar el sector público con unos Presupuestos muy austeros” que garanticen los compromisos de déficit”. Aunque Montoro ha recalcado que habrá que hacer reformas en varios ámbitos: la estabilidad presupuestaria, el mercado laboral y el sector bancario para “abrir un horizonte de crecimiento a partir de 2013“, ha descartado de plano una subida de impuestos, incluido el IVA, “los “grandes impuestos no deben subir porque se perjudicaría a la economía, ya en riesgo de recesión, y traería más paro”, aseguró Montoro, quien añadió que “debemos hacer lo contrario: usar el sistema tributario para financiar mejor a las empresas”.
En esto sí han imitado a Rajoy, y los dos dirigentes populares no han contestado dónde se harán los recortes, limitándose a precisar que, “no se trata de eliminar hospitales ni camas, sino reformar el funcionamiento de este servicio público en el que ha asegurado que hay mucho despilfarro, algo que saben los propios profesionales”.
En lo que sí han sido terminantes es en lo que se refiere a la reforma del mercado de trabajo, “debe hacerse sí o sí, aunque no haya acuerdo con sindicatos y empresarios” ya que, a su juicio, “el mercado laboral español es de los que peor funcionan en el mundo”. Entre sus principales problemas han citado las subidas salariales,“muy por encima de la de otros países de la UE” y que repercuten en la inflación, además de “una rigidez en las relaciones laborales que lleva a los empresarios a elegir el despido como herramienta principal de ajuste”.
