Al menos esto es lo que acaba de decir en Santiago de Compostela el ministro de Fomento y portavoz del Gobierno, José Blanco. Les ha dicho a los periodistas gallegos que ni él ni el candidato socialista a la Presidencia, Alfredo Pérez Rubalcaba, presionaron en ningún momento al jefe del Ejecutivo español, José Luis Rodríguez Zapatero, para adelantar las elecciones generales, el próximo 20 de noviembre.
Blanco se ha limitado a poner en su boca las mismas palabras de Rodríguez Zapatero, que el adelanto electoral de los comicios generales se debe a una prerrogativa del presidente del Gobierno.
