El mismo ha sido diseñado por el biólogo gallego Ramón Bodenlle, impulsor del grupo Élivo, quien ha desarrollado la planta desalcoholizadota en Boqueixón (A Coruña). La misma es la mayor de Europa y ha supuesto adaptar la forma casi artesanal con la que la firma llevaba haciendo este proceso hace años Esta nueva tecnología permite la fabricación de 12 millones de litros al año, lo que equivale a unas 2.500 botellas por hora.
Parte del equipo fue desarrollado por el grupo de I+D de élivo, compuesto por cuatro personas, y el resto fue comprada en Alemania permitiendo lo que se ha denominado ‘presurización combinada’, consistente en incrementar “al mismo tiempo” la temperatura del vino, hasta los 36 grados, y la presión a la que está sometido el líquido.
La maquinaria, en la que se han invertido 2 millones de euros, estará operativa a finales de este mismo mes.
