El presupuesto para la primera fase de reconstrucción de Japón tras el tsunami y el terremoto del pasado 11 de marzo está en marcha: ya se ha aprobado una primera partida extra de 4 billones de yenes, unos 33.000 millones de euros para financiar la limpieza de escombros en el noroeste y la construcción de viviendas provisionales para las víctimas de este desastre natural. El presupuesto se llevará la próxima semana al Parlamento para su aprobación el próximo 2 de mayo.
La mayor parte de esta partida, cerca de 10.000 millones de euros, estarán destinados a obra pública, como la reconstrucción de carreteras, escuelas, puertos y la restauración de terrenos agrícolas. Mientras, otros 4.300 millones se derivarán a respaldar a las pequeñas empresas de las zonas afectadas, 3.000 millones se irán a la construcción de viviendas temporales, otros 3.000 millones a la retirada de las toneladas de escombros y 411 millones al pago de indemnizaciones.
A este presupuesto le seguirán otros dos hacia el mes de junio que implicarán un desembolso total de más de 82.000 millones de euros, unos 10 billones de yenes. Esta partida extra no afectará a la política fiscal del país, con una deuda pública del doble del PIB: no se necesitará una nueva emisión de bonos ya que para conseguir la partida se han desviado algunos de los fondos de los presupuestos generales para este año fiscal, que en Japón comienza en abril.
El terremoto y posterior tsunami, con innumerables réplicas de importante intensidad, que afectó sobre todo a las prefecturas de Miyagi, Fukushima e Iwate dejaron 14.133 muertos y más de 13.300 heridos.
