Eso ha constatado la Dirección General de Tráfico durante el tiempo que lleva en vigor la medida. Exactamente las sanciones impuestas por los radares, fijos y móviles, que la DGT ha dispuesto en autopistas y autovías se redujeron en un 62% durante la primera semana de vigencia de la norma, como ha asegurado el director de este organismo.
Pere Navarro, ha subrayado que “en general se han reducido en todos ellos y, lo que es aún mejor: se han reducido las infracciones y las denuncias por exceso de velocidad». Eso sí, Navarro ha sido cauto y ha recalcado que el plazo transcurrido desde que se aplica esta norma es aún muy corto como para sacar conclusiones, “aunque la impresión de la DGT es que la gente ha entendido la medida, corre algo menos, y no pasa nada«. Sobre si ello se ha debido a la advertencia de sanciones o a la concienciación de la gente de que se consume menos a esa velocidad, el director de Tráfico ha contestado que » creo que la gente ha entendido que lo que hay que hacer es levantar un poco el pie del acelerador para reducir la factura energética”.
