Sólo necesita unos 14 metros de diámetros y otros 20 de altura, podrían instalarse en rotondas o zonas similares y se amortizarían con publicidad gracias a las paredes serigrafiables que lo convertirían en una pantalla publicitaria gigante. Son minieólicas, un invento de tres jóvenes de la Universidad de Cádiz que llevan tres años trabajando en un proyecto que ya ha recibido todos los vistos buenos y está a las puertas de fábrica esperando que aparezca algún socio capitalista que haga posible la aventura. Las primeras propuestas ya han llegado de Alemania, Argentina o Arabia Saudí.
El sistema podría generar hasta 100 kw, suficientes para alumbrar una gran avenida de una ciudad con leds o para abastecer una urbanización con 20 viviendas unifamiliares de forma directa, sin necesidad de transformadores. La turbina, de fácil instalación en una estructura de hormigón, cuesta 600.000 euros, aunque sus creadores ya han hecho cálculos: se amortizaría en 15 años gracias a que se puede utilizar como soporte publicitario.
