Los médicos del Servicio Galego de Saúde (SERGAS) tendrán que atenerse a un catálogo de medicamentos a la hora de recetar. Desde hoy deberán ceñirse a 34 genéricos que, por su precio, supondrán que la Xunta se ahorre este año unos 100 millones de euros. Según Sanidade, estas medicinas, que no serán siempre las mismas, sino que irán cambiando en función de los precios para elegir siempre las más baratas, tienen las mismas propiedades y sirven para tratar las mismas enfermedades que las que se prescribían hasta ahora, por lo cual los pacientes no notarán la diferencia y se ajustarán a las patologías diagnosticadas.El nuevo catálogo incluye medicamentos para la hipertensión arterial, el reumatismo o el control del colesterol y si un médico decide dar a un paciente un medicamento no genérico con los mismos principios activos que el que esté en la lista de Sanidade, deberá explicar a la inspección médica el motivo de ello. Paralelamente, las farmacias deberán tener estos genéricos en sus estanterías antes del día 16.
