Salieron por la puerta principal sin que nadie les dijera absolutamente nada. Sucedía ayer en una cárcel al norte de México, en una localidad fronteriza con Estados Unidos (Tamaulipa), donde 141 presos se escaparon huyendo en fila de Nuevo Laredo por la entrada principal de la prisión. El director de la cárcel, que ha sido destituido junto con el director general de todos los penales del país, lleva desaparecido desde el mismo momento en el que se ha producido la fuga.
No es la primera vez que sucede algo similar en el país. Hace tres meses otros 85 presos escaparon de la cárcel de Reynosa, en la misma localidad, muchos de ellos con delitos relacionados con el narcotráfico. El cártel del Golfo domina la zona y, tras la huida, se desató una oleada de violencia en el norte de México con ejecuciones y enfrentamientos entre cárteles y rivales y las fuerzas de seguridad.
