El paso que sí dará dentro de cuatro meses, es pasar la versión on line a un modelo de pago, de manera que los millones de lectores del ‘The New York Times’ podrán acceder a un determinados artículos de manera gratuita, pero tendrán que pagar por el resto, algo que Sulzberger cree que es lo que pide el negocio de la comunicación: “un soporte que pueda transmitir adecuadamente el periodismo de calidad“.