La denuncia de la CIG de irregularidades en la subcontrata de empresas portuguesas para las humanizaciones, que ayer era para el alcalde una muestra de xenofobia, hoy se ha vuelto algo más serio. Tanto es así que, según fuentes del mencionado sindicato consultadas por esta redacción, esta circunstancia supondría que, “alrededor de un 40% ” de los trabajadores empleados en las mismas procederían de Portugal y “en muchos casos” estarían en unas condiciones laborales que vulneran el convenio colectivo de la construcción de Pontevedra.
Este dato sería el que habría hecho que el alcalde tomase la decisión de citar el martes a “todas las empresas concesionarias de obras municipales” para verificar que se cumplen las condiciones del Plan E, “generar empleo de calidad con personas procedentes del INEM del área de Vigo“.
Abel Caballero aseguró que, pese a no conocer aún la denuncia de la CIG va a “poner la venta antes que la herida” y a ser inflexible con el cumplimiento de los términos de la concesión, en los que se exige que el empleo que creen las humanizaciones sea de vecinos de la ciudad. El alcalde recalcó que en esto “voy a ser absolutamente inflexible” y que revisará caso por caso, advirtiendo que si no se han respetado los términos de los contratatos lo tendría en cuenta “para futuras concesiones“.
Caballero, que recordó que el Plan E generó el año pasado 1.500 empleos directos y otrso 6.000 indirectos en Vigo, señaló que “ahora mismo estamos inspeccionándolo todo“ y enfatizó que porueba de ello es que el Conceloo ha firmado un convenio con CIG, CCOO y UGT para que velen por el respeto de las condiciones laborales en estas obras.
