El Eurogrupo ya ha dado el visto bueno al paquete de medidas para echar una mano a Grecia y ayudarle a salir de la pésima situación económica en la que se encuentra. El plan de rescate acordado con la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional, sin precedentes, incluye importantes medidas y sacrificios para todos los griegos en los próximos meses.
Para evitar que el país entre en bancarrota Grecia tendrá que poner su déficit por debajo del 3 por ciento en tres años, algo tremendamente complicado si se tiene en cuenta que en la actualidad es del 13,6%. Una de las primeras medidas serán los recortes salariales, tanto de los funcionarios como en el sector privado. Se cancelarán las pagas extra, se bajarán las horas extra y se detendrán las contrataciones públicas. Mientras, los políticos, aunque ya han avisado de que no se bajarán los sueldos, sí que quedarán congelados durante 3 años.
Se recortarán las pensiones, aunque los que reciban menos de 2.500 euros al mes tendrán derecho a una paga de 250 euros en Semana Santa y verano y a una de 500 en Navidad. Se equiparará la edad de jubilación de hombres y mujeres y se subirá un 2% el IVA y un 10% los impuestos sobre alcohol, tabaco y gasolina.
Se suspenderá la partida destinada al Fondo Solidario y las empresas que tengan beneficios tendrán que contribuir con un gravamen especial que aún no se ha establecido.
El Eurogrupo ha decidido aportar más dinero que los 45.000 millones de euros iniciales que iban a dar a Grecia en colaboración con el Fondo Monetario Internacional. En total se pondrá en marcha un plan de rescate de hasta 110.000 millones de euros en tres años, de los que 80.000 serán préstamos bilaterales de los países de la Unión. El resto lo aportará el FMI.
