El presidente de la Xunta no pudo inaugurar las humanizaciones de Florida y Castrelos ante las protestas de la Plataforma pola Sanidade Pública, personal del Hospital Xeral y Afectados por las Expropiaciones de la Plataforma de Salvaterra- As Neves (PLISAN). Los gritos empezaron cuando Feijóo se bajó del coche delante del Pabellón de As Travesas y siguieron durante todo el recorrido que hizo, a pie y acompañado del alcalde, el conselleiro de Infraestructuras y varios concejales de su partido y de los dos que gobiernan en la ciudad.Los incidentes arreciaron al llegar al podio dispuesto para que las autoridades tomasen la palabra, desde las dos aceras de la calle, los manifestantes impidieron que se oyesen las explicaciones sobre las características de las mejoras dadas por uno de los técnicos. Al acabar las mismas, el presidente de la Xunta se acercó a Caballero y le dijo “me voy, aquí no puedo hablar, disculpa”. El alcalde le contestó “como tú digas, presidente, aquí mandas tú”, “sí, me voy”, ratificó el jefe del ejecutivo gallego, que aprovechó los minutos que tardaron en llegar su coche oficial y el resto de los vehículos de la comitiva para despedirse de unos contrariados dirigentes del PP, entre ellos el presidente de la Diputación, Rafael Louzán, su conselleiro de Infraestructuras, Agustín Hernández, la delegada de territorial de la Xunta en Vigo, Lucía Molares,o el portavoz del grupo municipal popular, Chema Figueroa.
Preguntado por los motivos que habían obligado al presidente a irse, Abel Caballero aseguró que lo único que le dijo Feijóo es que en medio de ese ruido no podía tomar la palabra y que se iba pese a que el alcalde le comentó que él sí estaba dispuesto a dirigirse al público
