Llevaban una buena racha que ha acabado de forma inesperada y triste ante más de 8.000 espectadores. El Celta perdía tres puntos valiosísimos contra el Real Unión, un rival directo en la lucha por la permanencia, por un penalti a diez minutos del final cuando los visitantes estaban con 10 jugadores en el campo. De nada sirvió el dominio de los vigueses.
El Celta tardó 5 minutos en hacerse con el control del juego, aunque se vio enseguida que la tarea no iba a ser fácil. Con mucha paciencia y tras un par de llegadas, Vasco lanzaba a puerta el primer disparo con peligro de los célticos a los 14 minutos. Enfrente un Real Unión que peleaba al máximo, defendiendo y saliendo a la contra de forma rápida.
Un partido incómodo, complicado, en el que los de Iñaki Alonso tuvieron que esperar al borde del descanso para hacer la primera tentativa que Falcón paró sin problema. Al regreso de los vestuarios el panorama apenas había cambiado: Papadopoulos probó suerte a los 2 minutos, pero el encuentro seguía igual de atascado. Un quiero y no puedo para el Celta a causa del empeño en destruir del Real Unión.
Papadopoulos y Trashorras lo intentaron sin descanso sin éxito. En el minuto 64 los de Alonso se quedaban con 10 en el campo por doble amarilla a Aitor Sanz, pero ni aún así. Los vigueses aumentaron el ritmo y comenzaron a llegar en oleadas, pero todo quedaba en casi goles a pesar del acoso.
Y cuando ya casi todos estaban pensando en irse a casa el árbitro pitó un penalti a favor del Unión que acabó con la expulsión de Hugo Mallo y el pleno acierto de Eneko Romo, que daba la victoria y los tres puntos a los visitantes.
Ficha técnica
0 – R.C. Celta: Falcón, Vasco (Hugo Mallo, 54′), Noguerol, Catalá, Roberto Lago, Jonathan Vila (Michu, 67′), López Garai, Trashorras, Papadopoulos, Danilo y Cellerino (Dani Abalo, 45′).
1 – Real Unión: Otermin, Gurrutxaga (Quero, 76′), Gabarain, gerlo, Lacruz, Abasolo, Aitor Sanz, Juan, Brit (Salcedo, 68′), Eneko Romo y Goran Maric (Goikoetxea, 56′).
