El alcalde está dispuesto a hacerse cargo de la gestión de la depuradora y construirla conjuntamente con el Ministerio de Medio Ambiente. Esta es la oferta que ha hecho a la Xunta después de que el conselleiro de Infraestructuras y Medio Ambiente asegurase que el gobierno autónomo está dispuesto a hacerse cargo de las competencias en saneamiento que corresponden al Concello.
Eso sí, Abel Caballero exigió que antes la Xunta transfiera a la ciudad los mismos recursos que destinó a la construcción de similares procesadoras en Santiago, Lugo, Ourense o Coruña ciudad que, volvió a recordar “no puso ni los terrenos para ella, que es algo que sí hará Vigo”. El alcalde anunció ayer que había dado orden a Aqualia de comprar esos terrenos y traspasarlos al ejecutivo autonómico y que con ello el compromiso de Vigo “estaba cumplido”.
El ofrecimiento de la Xunta, que Caballero aseguró sólo conocía por los medios de comunicación, sería asumir las competencias de la EDAR de Vigo, algo que el alcalde rechaza ya que si sucediese eso se sobrecargaría a los vigueses con tasas de saneamiento “y esos recursos se irían a otro sitio”.
Caballero declaró que “nosotros garantizamos el buen servicio y que la ciudad pague exactamente el coste de la depuradora“, y reclamó para los vigueses un trato igualitario con el resto de las vecinos de las demás capitales gallegas sumando a ello “la fuerza moral” de haber mediado en la negociación en la que el Ministerio de Medio Ambiente “prestó” a la Xunta de 120 millones de euros para construir la infraestructura.
