Desde ayer ya rige en Galicia la nueva Lei de Caixas, que fue publicada en el Diario Oficial de Galicia. el día 5. La Lei de Caixas, aprobada el día 29 en el Parlamento de Galicia, contó con los votos a favor del grupo popular y del Bloque Nacionalista Galego y la oposición del PSdG-PSOE que denunció un intento de la Xunta de aplicar en la comunidad un modelo similar al que rige en Madrid.Precisamente su secretario general, Manuel Vázquez, ha anunciado un la interposición de recursos contra la ley, el primero de ellos el del alcalde de Vigo, quien ayer aseguró que recurrirá a los tribunales para impedir que el Concello se quede sin representación en el consejo de administración de Caixanova y que esta misma semana podría pedrir la “suspensión cautelar” de la misma, “como ya hizo el alcalde de Madrid en su día”. Abel Caballero indicó que actuará de esta manera para evitar lo que podría ser un “daño irreparable” actuación en la que no es secundado por el PP, que lo acusa de buscar rendimiento electoral, ni por el BNG, su socio de gobierno.
La nueva Lei de Caixas supone, de hecho, el fin de la presencia del actual presidente de Caixanova, Julio Fernández Gayoso, en los órganos de gobierno de la misma, después de 45 años de estancia interrumpida en los mismos, ya que el texto contempla la jubilación de los miembros del consejo y de la asamblea que hayan cumplido los 70 años.
Este relevo tendrá que producirse, junto con el de las tres cuartas partes de la directiva de la caja antes del 6 de de marzo, tal y como establece la nueva reglamentación. Aunque durante los últimos días se creía que, además del por ael consistorio vigués, la reglamentación sería recurrida por el Gobierno Central, como habían dejado entrever en los últimos días varios miembros destacados del Partido Socialista, el ejecutivo de Zapatero no se opondrá a la misma ante los tribunales.
