Empiezan hoy, pero según los comerciantes no serán como siempre. Las primeras rebajas de 2010 estarán señaladas por la crisis (gastaremos un 10% menos que en 2009), será por eso que durarán dos meses en los que se prevé que algunos comercios ofrezcan descuentos de hasta el 70% en sus artículos.Según una encuesta entre dos mil personas realizada por la Federación de Usuarios-Consumidores Independientes (FUCI), los españoles gastarán una media de 95 € en estas rebajas de invierno, la mayor parte de ellos en ropa.
Madrid, con un gasto de 108 euros, y Cataluña con 105 son las regiones más consumistas, de acuerdo con dicha encuesta, mientras que castellano.manchegos y canarios serán los más comedidos a la hora de gastar ya que no superarán los 90 € por cabeza.
En Galicia nos apuntamos al ‘con su mismo’: con su mismo coche, con su mismo traje, con su mismo movil
Los gallegos imitaremos a los canarios y no superaremos los 90 € de gasto, lo que representa un 14%, que hace 12 meses: entonces dispusimos de 105 €. Aún así los comerciantes esperan recaudar lo mismo que en 2009: 98 millones de euros, eso sí, vendiendo mucha más mercancía y a precios mucho más reducidos que entonces.
Consejos para no quedar de pardillos
La Confederación Española de Consumidores y Usuarios (CECU) recuerda en un comunicado que evitemos “comprar por comprar“, señala que la normativa prohíbe vender artículos defectuosos o con taras como rebajas, ya que hay que diferenciar entre este período y los saldos. Además, todos los artículos que se vendan en rebajas deben haber estado a la venta los días anteriores en el establecimiento.
En relación con los cambios o devoluciones, la CECU ha subrayado que los comercios no están obligados a hacerlos, por lo que el consumidor debe informarse sobre ello antes de comprar y así decidir en qué comercio hace las compras y elegir quizás el que sí permite esas posibilidades.
En cuanto a la forma de pago, si un comercio permite pagar con tarjeta el resto del año, no puede negarse a aceptar ese medio de pago en período de rebajas. Asimismo, los artículos a la venta deben tener marcado el precio antiguo o bien el porcentaje de rebaja que se les aplica.
