Galicia

Expulsan a un Guardia Civil por usar la tarjeta de un fallecido en accidente de tráfico

 

Utilizó la tarjeta 69 veces y firmó con el nombre del fallecido.
Utilizó la tarjeta 69 veces y firmó con el nombre del fallecido.

Robó la tarjeta de crédito a un fallecido en accidente de tráfico y la utilizó 69 ocasiones. La Sala de lo Militar del Tribunal Supremo corroboró hoy  la resolución del Ministerio de Defensa del 7 de abril de 2008 por la que se expulsaba de la Guardia Civil al agente gallego.  El condenado pedía que simplemetne se le suspendiera del puesto o se le bajase en el escalafón militar, acorde también a las faltas calificadas como ‘muy graves’.

En la sentencia se recalca que su conducta fue “objetivamente incompatible del todo con las exigencias de probidad y rectitud que como norma de vida imponen al militar” la ley. Además, añade que trae como consecuencia una “grave transgresión del decoro” y de “las exigencias de integridad y dignidad” que se le requieren.

La expulsión del cuerpo fue impuesta por el Ministerio de Defensa en 2008  después de que el Juzgado de lo Penal número 3 de Pontevedra condenara al agente a un año y seis meses de cárcel por un delito continuado de estafa y falsedad de documento mercantil. La pena fue conmutada por otra de un año y seis meses de multa en marzo de 2007, por un acuerdo del Consejo de Ministros.

  • Firmaba con el nombre del fallecido

El ahora expulsado aprovechó un accidente en el que murieron 3 personas la noche del 11 de octubre de 2002 para robar la tarjeta de crédito de una de las víctimas. Días después empezó a utilizarla para pagar compras, abonos de peajes y gasolina, y comidas.   En total, la utilizó en 69 ocasiones y gastó 1.323,13 euros.   Según la sentencia del tribunal gallego, el acusado “padecía un trastorno adaptativo mixto ansioso depresivo con alto grado de esquizotipia de carácter crónico, que le hizo actuar sin capacidad volitiva plena”, lo que influyó en la concesión del indulto.

Sin embargo, el Tribunal Supremo  asegura que “conocía lo que hacía y quiso hacerlo” y ” si su voluntad hubiera estado anulada habría sido absuelto”.

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