El joven de 21 años que fue pillado circulando en su moto a 249 kilómetros por hora por la autovía de O Salnés acató esta mañana una condena de 4 meses de cárcel y dos años de retirada de carnet, una pena inferior a la que pedía en principio la Fiscalía, con seis meses de prisión y 3 años sin poder conducir.
El motorista se presentó esta mañana en el Juzgado de lo Penal número 1 de Pontevedra y era la segunda vez que se sentaba en el banquillo por este delito, ocurrido el 2 de octubre, cuando el radar lo sacó conduciendo a 249 km/en una zona limitada a 100. En un primer momento el joven intentó justificar su actuación y rechazar la pena alegando que su madre se había caído y estaba preocupado.
