El Juzgados de Menores de Pontevedra ha ordendo dos años de internamiento en un centro en régimen cerrado y un año más de libertad vigilada para el menor que propinó un puñetazo al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, durante un acto electoral en Pontevedra el pasado 17 de diciembre, tres días ante de las elecciones nacionales.
Fiscalia y defensa del menor han llegado a un acuerdo de conformidad después de la celebración de una vista en la que el joven reconoció los hechos y mostró arrepentimiento, una imagen muy alejada de la actitud desafiante mantenid durante su detención.
Al joven se le imputa un delito de atentado contra la autoridad y ya permaneció internado desde que sucedieron los hechos como medida cautelar, según había decretado el juez de instrucción 1 de Pontevedra. La pena es la más dura que recoge la Ley del Menor para estos caso, que en esta ocasión irá acompañada además de medidas de reeducación.
